Concretamente, los cultivos de la zona de Adra y la comarca de Níjar son los más afectados por la falta de lluvia y los que se están quedando sin agua en algunos casos, aunque la situación de alarma es generalizada en la provincia. Y es que se está reduciendo por parte de las comunidades de regantes el agua suministrada a explotaciones, es decir, la están racionando.
Góngora explica que a la sequía se ha sumado que la campaña ha dado comienzo de manera temprana, “por lo que la necesidad de agua es mayor para los cultivos, debido a las altas temperaturas y a que los días son largos aún. Todo ello ha provocado que los pozos se estén agotando y haya agricultores que se han visto obligados a recurrir a cubas de agua para poder regar”.
Pero para el responsable de COAG Almería el fondo de este importante problema se encuentra en la necesidad de que se lleven a cabo más inversiones en materia de regulación de abastecimiento y capacidad de embalse, así como exige que no se autoricen más regadíos a macro explotaciones en manos de fondos de inversión.
Ante la gravedad de la situación, desde COAG Almería se recomienda a aquellos agricultores que tengan daños en sus cultivos por la sequía que se pasen por la oficina de esta organización agraria para dejar constancia de un informe de daños.