- Las playas de la capital tendrán capacidad para 138.181 personas, con todas las medidas de seguridad.
- Níjar permitirá en sus playas el aforo que garantice que se cumplen las distancias de seguridad entre personas.
Más de 138.000 personas en las 15 playas abiertas en la ciudad de Almería
“Será un verano diferente como consecuencia de la crisis sanitaria del Covid-19, pero no quiere decir que sea peor. Por eso, desde el Ayuntamiento de Almería hemos preparado un Plan de Contingencia que garantice el disfrute de la playa y el mar, a la vez que proporcione todas las medidas de seguridad necesarias para los bañistas”. Ésta es la reflexión final del concejal de Promoción de la Ciudad, Carlos Sánchez, tras explicar a los periodistas a lo largo de más de 40 minutos los detalles de este protocolo, que se extenderá desde el 15 de junio al 30 de septiembre, “elaborado siguiendo lo establecido en el Decreto-Ley 12/2020 de 11 de mayo, y sujeto a posibles cambios en función de la legislación que se vaya publicando”, en la primera rueda de prensa municipal presencial.
El principal objetivo es garantizar la distancia de seguridad fijada en dos metros entre las personas, y con este planteamiento las playas de Almería tendrán este verano una capacidad máxima para 138.181 personas. Un total de 15 playas, desde La Garrofa hasta Cabo de Gata, que contarán con diferentes servicios y medidas, y donde sólo ha quedado excluida la Playa de San Telmo, que estará cerrada. Carlos Sánchez asegura que “no pensamos que se vayan a cubrir el aforo máximo en ninguna de las playas”.
El Plan de Contingencia para el verano almeriense presenta como primera novedad un horario de apertura y cierre de las playas, de 7 de la mañana hasta 12 de la noche, dejando la noche para la limpieza.
El aforo máximo en las 15 playas se distribuye de la siguiente manera:
- La Garrofa: 333 personas
- Las Olas 694 personas
- San Miguel-Las Conchas: 7.750 personas
- El Palmeral-Nueva Almería: 7.500 personas.
- El Bobar: 2.167 personas.
- Costacabana: 4.667 personas
- El Perdigal: 8.167 personas
- El Toyo: 7.944 personas.
- Retamar: 6.250 personas.
- Torregarcía: 18.000 personas.
- Las Amoladeras: 41.667 personas.
- San Miguel de Cabo de Gata: 2.444 personas.
- Las Salinas de Cabo de Gata: 26.398 personas.
- La Almadraba de Monteleva: 2.200 personas.
- La Fabriquilla: 2.000 personas.
En plena desescalada ha coincidido la presentación del Plan de Contingencia de las Playas con la primera rueda de prensa municipal presencial, con los periodistas separados y con sus mascarillas. Es el signo de que la ciudad sigue dando pasos adelante en la nueva normalidad. El concejal ha ido explicando las novedades del baño este verano, y entre ellas se encuentra que los menores de 14 años deberán ir acompañados por un adulto a las playas, los parques infantiles en la arena estarán cerrados, se reducirán las pasarelas de acceso y las papeleras estarán fuera de la arena. Por su parte, para evitar el contacto con la piel las duchas se accionarán con un mecanismo de botón de pie y sólo estará activo uno de los dos brazos para evitar el contacto. A los aseos sólo podrá acceder una persona en cada ocasión, salvo que necesite asistencia y en este caso podrá ir con un acompañante. Se limpiarán cuatro veces diarias.
La arena también se limpiará con dos operaciones. Un barrido manual por la brigada de playas y un cribado mecánico, que consiste en el volteo y aireación de la arena mediante un equipo formado por un tractor más cribadora remolcada por el mismo. También se limpiará el agua del mar, en una franja diaria de mar limitada desde la costa hasta 20 metros de profundidad. Se realizarán tres desinfecciones diarias de las playas en la temporada alta.
En cuanto a los espacios para personas con movilidad reducida, se ha hecho un esfuerzo inversor y las zonas de sombra accesible pasarán de 5 el año pasado hasta 7 este verano, y las sillas anfibias de 5 hasta 18 este año. El concejal ha recomendado que se soliciten con cita previa al nuevo teléfono de playas 666 344 140, aunque si se acude directamente también podrá usarse si están disponibles.
Investigación sobre la arena y el mar
El llamado ‘Equipo Covid’ estará formado por el personal responsable de playas del Área de Promoción de la Ciudad del Ayuntamiento de Almería y 126 vigilantes dispuesto por la Dirección General de Emergencias y Protección Civil dependiente de la Junta de Andalucía. Estos vigilantes se encargarán de informar a los ciudadanos de la normativa a seguir. Junto a ellos participará la Policía Local de Almería. En esta línea, se han impreso 175 carteles con toda la información para los bañistas que se repartirán por la costa.
En la temporada de mar habrá un total de 31 socorristas repartidos en 8 de las 15 playas de la ciudad, en horario diario de 12 a 20 horas y en septiembre, los fines de semana, de 12 a 19 horas. Los recursos previstos para el Plan de Playas municipal son de siete bases de salvamento, nueve sillas torre de vigilancia, dos vehículos de intervención rápida, cuatro embarcaciones y el vehículo del coordinador de playas, aunque la ampliación de la dotación económica de la Junta de Andalucía permitirá aumentar los medios.
Un aspecto innovador anunciado por el concejal Carlos Sánchez es la firma de un convenio entre el Ayuntamiento, Universidad de Almería y el Hospital Universitario de Torrecárdenas, “en una iniciativa del alcalde de Almería, que permitirá analizar la posible presencia del Covid19 en la área y el mar de las playas de la ciudad. Es una investigación que desconozco que se vaya a hacer en otras costas y con la que testaremos la salud de las playas almerienses”.
Carlos Sánchez es optimista, dentro de las circunstancias, sobre el turismo en nuestra ciudad, y lo basa en “los datos de reservas de hoteles hasta la fecha y las reuniones mantenidas con el sector”. Por eso, el Ayuntamiento de Almería se volcará con una campaña a nivel nacional, en el entorno digital y televisiones, donde pondrá en valor a la ciudad como destino seguro.
En Níjar solo habrá la limitación de aforo que permita mantener la distancia de seguridad
La alcaldesa de Níjar, Esperanza Pérez Felices, ha iniciado una ronda de contactos con profesionales y empresarios turísticos de la comarca de cara a la apertura de la temporada de verano, ante las extraordinarias perspectivas de ocupación que habrá en el litoral nijareño. El equipo de gobierno trata así de adaptar la nueva situación que se dará tras la finalización del estado de alarma desde el consenso de todos. Aforos, movilidad o la demanda de refuerzos en servicios municipales son algunos de los puntos que ocupan y preocupan tanto a institución como a agentes turísticos, que han centrado el contenido de las reuniones.
En este sentido, la primera edil ha señalado que “teniendo en cuenta que nuestra libertad para disfrutar sólo tiene como límite el del derecho de los demás a sentirse seguros, la cuestión de aforos no tendrá más limitación que la de guardar las distancias de seguridad entre las personas que confluyan en un mismo lugar, ya sea calle, plaza, terraza o playa. Todo se puede resumir en la responsabilidad de cada uno de cumplir y hacer cumplir a los demás con conductas ejemplares”. La alcaldesa quiere zanjar las innumerables hipótesis sobre restricciones, medidas excepcionales o control de accesos, y al respecto ha señalado que “nadie va a intervenir o perturbar a nadie si las cosas suceden con normalidad, con orden y sin perder el respeto a la difícil situación sanitaria de la que venimos”.
En los últimos días se han mantenido encuentros con diversos colectivos de Agua Amarga, Las Negras o San José, pero ya están en agenda reuniones con agentes sociales y económicos de Rodalquilar, Las Isleta del Moro y demás puntos de la comarca de Níjar que tienen marcado perfil turístico. “Ellos -refiriéndose a profesionales y empresarios del sector hostelero-, pasan a ser ahora la primera línea de batalla, que hasta hace unos días han ostentado los sanitarios en los hospitales curando a los enfermos, pero llegado este momento son las empresas turísticas las que tendrán que iniciar la cura de ese otro efecto del Covid, que ha sido la inactividad económica. Son estas empresas las que van a poner a rodar nuevamente la economía, y necesitamos de ellas para recuperar la normalidad, reaprender a convivir. Cada idea, cada aportación que hagan va a ser escuchada y tenida en cuenta, y si está arropada por la unanimidad o un consenso notablemente mayoritario, tomaremos ese camino entre todos”.
Esperanza Pérez no cierra la puerta a que a lo largo de las semanas se puedan ir produciendo cambios o refuerzos en los servicios municipales atendiendo a la demanda que surja, ya que todos los participantes en los encuentros coinciden en que este verano se trabajará sobre un terreno totalmente desconocido. En este sentido la alcaldesa ha mostrado su total disposición a establecer planes de actuación flexibles, que permitan corregir sobre la marcha cualquier carencia o necesidad.
“En Níjar no hay más limitaciones que las que establezca la ley, y a partir de la Fase 3 entraremos en un escenario de seminormalidad. Entiendo las dudas sobre cuántas personas pueden entrar en una u otra playa, pero la cuestión no será tanto el número como que se mantengan las distancias de seguridad. En cualquier caso ese control dependerá de los vigilantes de la Junta, y por encima de ello el Ayuntamiento, y que de eso no le quepa duda a nadie, estará ahí para defender los derechos de todas y todos los nijareños”.
La campaña turística en Níjar ya está totalmente preparada, con los planes de playas presentados y servicios de salvamento y socorrismo programados, incluso se trabaja con la previsión de que esta temporada pueda ser más larga de lo normal por un posible escalonamiento de la llegada de turistas nacionales y extranjeros en diferentes periodos. Para estos supuestos el Ayuntamiento contará con el asesoramiento y consenso del sector a la hora de tomar medidas que puedan ayudar a prolongar esa temporada que comienza en los próximos días.