El MEMOLab ha descubierto este aljibe durante los sondeos que están llevando a cabo en el Castillo de Tabernas, una alcazaba de época medieval que el Ayuntamiento está rehabilitando dentro de su estrategia de recuperar su patrimonio histórico para impulsar el turismo cultural en el municipio, con fondos del 1,5% cultural del Gobierno central y del propio Ayuntamiento de Tabernas.
La estructura del aljibe, explica el grupo de la Universidad de Granada, está compuesta por "una nave rectangular cubierta por una bóveda ligeramente apuntada" que se encuentra "en buen estado de conservación" a pesar de su antigüedad y de que el brocal había permanecido abierto hasta hace unas décadas, según ha confirmado el Ayuntamiento en su página de Facebook.
Ahora, los trabajos que se están llevando a cabo y su posterior documentación permitirán realizar la interpretación de los espacios que se vayan localizando.
Castillo de Tabernas, rehabilitación sin reconstrucción
“Desde que llegamos al Ayuntamiento tenemos la idea clara de preservar nuestro patrimonio histórico y cultural”, asegura José Díaz, alcalde de Tabernas, que recuerda que hasta el momento han conseguido “la declaración BIC de la iglesia, que se inicien los trámites para Terrera Ventura, la subvención del 1,5% cultural para el castillo y la subvención del Grupo de Desarrollo Rural para la rehabilitación de la ermita de San Sebastián”. Todo, con un doble objetivo, la conservación de ese patrimonio y posibilitar que sea visitable y, por tanto, atraiga al turista cultural al pueblo. “Hemos tocado las partes más singulares de nuestro patrimonio, porque queremos conservarlo y porque, sin duda, es un gran atractivo turístico”, confirma José Díaz.
“Buscamos un turismo distinto al de carácter estacional, que solo se desplaza en verano, para visitar los poblados del Oeste y el desierto, por eso apostamos por un turismo que llegue al pueblo, un turismo cultural, arqueológico, y para eso hemos desarrollado estos planes de investigación y excavación, como el del castillo, para hacerlo visitable”, explica Alfonso Heredia, concejal de Turismo y Patrimonio Histórico. El objetivo es que quienes se acerquen a Tabernas puedan pasar el día visitando la iglesia, el castillo y, en el futuro, la ermita de San Sebastián, que también va a ser rehabilitada mediante los fondos FEDER. Todas estas actuaciones buscan ampliar la oferta turística de Tabernas, aunque, como recuerda el concejal, sin dejar de lado el de cine y familiar que llega atraído por los poblados del Oeste y los rodajes realizados en el desierto y el resto del municipio. De hecho, está previsto que se sustituyan y amplíen los paneles informativos en lugares emblemáticos de rodajes, ya que los actuales están deteriorados y no se incluyen las películas y series de los últimos años. Se trata, asegura el concejal, de “complementar y darle otras opciones” al turismo que ya va a Tabernas, para “intentar romper la estacionalidad”.
Con este objetivo, ya está en marcha la primera fase de la rehabilitación del castillo, dentro de un proyecto más amplio, que constará al menos de otras tres fases. Hasta ahora, recuerda el alcalde, “en el castillo nunca se han hecho intervenciones de importancia”. Y en las pocas que se han hecho en el siglo XX se reconstruyeron la torre de poniente o la portada. Fueron actuaciones, señala el concejal y doctor en Historia Moderna, “sin un criterio idóneo ni metodología arqueológica, que aportaron poco”. Por eso, ahora la idea es recuperar las estructuras originales del castillo mediante la excavación arqueológica en el perímetro del monumento hasta llegar a la base de la muralla; y a partir de ahí, consolidar y restaurar esas estructuras originales. Será, por tanto, una rehabilitación sin reconstrucción.
En la primera fase, la actuación se está llevando a cabo hasta un metro y medio de la muralla. Y en las sucesivas fases, se irá ampliando el área de excavación y se intervendrá sobre los elementos que se descubran. En este sentido, Heredia recuerda que el castillo de Tabernas cuenta con una segunda línea de murallas, viviendas intramuros de esta e incluso con una necrópolis. “Lo llamamos castillo”, señala el concejal, “pero en realidad es una alcazaba”. Ya en esta primera fase se van a incluir elementos de protección para facilitar que sea visitable, aunque la mayoría de esta parte de la intervención irá en las siguientes fases.
Las obras de esta primera fase, que está previsto que duren ocho meses, hasta principios del verano de 2021, así como las de la segunda fase, cuentan con la financiación del 1,5% cultural del Ministerio de Transporte. El 30% restante lo pone el Ayuntamiento. “En un presupuesto como este, es una cantidad bastante importante”, asegura José Díaz, que cuenta que han intentado “otras líneas de financiación, pero no hemos tenido éxito, tanto con la Junta como con la Diputación”. Por eso, añade que “estaría muy bien que la Junta invirtiese en patrimonio de los municipios pequeños, que no por ser más pequeños tienen un patrimonio menos importante”.