En la localidad almeriense, la empresa da empleo a cien trabajadores, la mayoría del entorno de la comarca del Bajo Andarax. A estos, hay que sumar los "más de 200 indirectos, porque son muchas las empresas que trabajan con Cemex, de toda Almería", según cuenta a Almería Información Lourdes Ramos, alcaldesa de Gádor, que asegura que "desde que soy cargo público, en el año 2003, es la peor noticia que he recibido". La alcaldesa considera "grave" que Cemex cierre sus puertas. "Me preocupa muchísimo porque las familias tienen ahora una incertidumbre muy grande", reconoce. Por ello, ha convocado un pleno extraordinario urgente en el Ayuntamiento de Gádor para tratar el asunto.
El grupo Cemex compró en 2014 la cementera de Gádor a Holcim, que aun mantiene su fábrica en Carboneras. El cierre anunciado ahora terminará con una historia de 42 años de funcionamiento de la fábrica de cemento de Gádor.
La noticia también ha provocado la reacción en contra de los sindicatos. Así, FICA UGT Almería ha anunciado su "rechazo total a las drásticas medidas abrazadas por la dirección de Cemex", y que van a planificar un calendario de "movilizaciones en repulsa a las disposiciones que la empresa pretende llevar a cabo en el próximo mes".
La empresa va a cerrar, además de la planta de Gádor, la de Lloseta, en Baleares, y su expediente de regulación de empleo afectará a sus centros en Valencia, Alicante y Buñol, entre otros.
Entre los motivos esgrimidos, están la situación del sector de la construcción y la nueva normativa europea de emisiones de CO2, que se aplicará a partir de 2020.